El ministro de Interior y líder de la Liga, Matteo Salvini, anunció este miércoles que el Gobierno italiano no firmará, en contra de lo anunciado anteriormente, el Pacto Mundial para la Migración que será adoptado en una cumbre que se celebrará en Marrakech (Marruecos) los próximos 10 y 11 de diciembre.
Durante una comparecencia en la Cámara de los Diputados, Salvini sorprendió anunciando que el Gobierno italiano no participará en la cumbre de Marrakech y someterá a votación en el Parlamento su adhesión al documento con el que las Naciones Unidas recomiendan una gestión global del fenómeno migratorio, como escribe en su artículo el periódico el Tiempo.
«El Gobierno italiano no irá a Marrakech, no firmará nada. El debate es tan importante que no puede ser sólo una elección del Gobierno. Tiene que ser el Parlamento quien discuta sobre el Pacto Global», aseguró.
«El Pacto Mundial para la Migración es un documento que trata temas que afectan a los ciudadanos»
Un compromiso que ahora parece haber sido puesto en cuestión influido por la línea dura contra la migración marcada por Salvini, abiertamente contrario a este acuerdo internacional.
El Pacto Mundial para la Migración fue acordado el pasado mes de julio por todos los Estados miembros de la ONU excepto por Estados Unidos, que se había retirado en 2017, y por Suiza, Austria, Hungría, Australia, Bulgaria, Israel, Polonia y la República Checa, que anunciaron que no ratificarían el acuerdo tras la salida de Washington.