En Florencia, un mexicano de 30 años, estranguló a la esposa proveniente de china en el hotel donde alojaban, el crimen ocurrió el día de ayer después una pelea muy fuerte de la pareja. El mismo mexicano de 30 años confesó el asesinato.
Parecía una tranquila mañana de sábado a finales de noviembre, en Florencia. En el Hostel Plus Florence, no lejos de la estación de tren Santa Maria Novella, un mexicano de 30 años de edad estranguló a su novia, jóven de la china de 21 años.
Una fuerte pelea por cómo continuar la luna de miel degeneró en una agresión mortal. Con él que pone sus manos alrededor del cuello de su esposa, apretando cada vez más hasta matarla. Esta es la razón por la que Tun Nay Bustos, de 30 años, un ingeniero mexicano de origen birmano, habría llevado a matar a su esposa, Qianying Liu, de 21 años, de china.
A confesar el crímen, el mismo jóven mexicano de treinta años, que en estado de shock contó lo que acababa de hacer a algunos empleados del hotel. La dinámica exacta del asesinato aún debe ser aclarada con certeza, pero según las declaraciones del jóven, parece que los dos comenzaron una pelea muy fuerte y que de repente puso sus manos alrededor de su cuello, apretándola para matarla y terminó estrangulandola, según el artículo del periódico italiano Il Giornale.it
Al darse cuenta de lo que habia hecho el hombre habría bajado a la recepción del Hotel y fue ahí que confesó todo a los empleados presentes.
El personal de la estructura fue inmediatamente al cuarto donde fue estragulada la mujer, que estaba en la cama de la habitación, desafortunadamente por ella no había nada más que hacer, estaba muerta.
Al lugar llegaron los agentes de la Policía junto con los investigadores del equipo móvil de la capital toscana. Al mexicano de 30 años lo llevaron a la estación de policía para un interrogatorio inicial. El joven había llegado a Florencia con su novia hace cinco días y tenía que partir a su país esta mañana.
Poco después del interrogartorio, terminó en una celda de la cárcel Sollicciano por cargos de homicidio voluntario. En espera de la autopsia, los investigadores continúan reconstruyendo la agresión en detalle.
