Al menos 276 personas murieron y otras 350 resultaron heridas luego de que un camión cargado de explosivos detonara este sábado en uno de los lugares más céntricos de Mogadiscio, la capital de Somalia.
De acuerdo con autoridades locales, el hecho, que fue seguido por una segunda explosión, constituye el «ataque terrorista» más mortífero contra civiles ocurrido en el país desde 2007, cuando lanzó su insurgencia el grupo yihadista Al Shabab, una organización extremista con vínculos con Al Qaeda.
El grupo, que se encuentra en constante lucha contra el gobierno somalí, no se ha atribuido la autoría del atentado.
Medios locales indicaron que la explosión destruyó edificios, hoteles, oficinas y comercios y la onda expansiva, que se sintió en toda la capital, generó una columna de humo negro de hasta tres kilómetros de altura.
El presidente Mohamed Abdullahi «Farmajo» Mohamed decretó tres días de duelo y atribuyó a Al-Shabab la responsabilidad del ataque contra la población civil.
«El incidente de hoy fue un horrible ataque llevado a cabo por Al Shabab contra civiles inocentes. No estaba dirigidos a objetivos específicos del gobierno somalí», aseguró en declaraciones a la televisión local.
Mayor número de víctimas
Mientras, fuentes médicas aseguraron que el número de víctimas fatales puede aumentar dada la magnitud del incidente.
«Es la mayor explosión que he visto en mi vida. Destruyó toda el área», le dijo a la agencia de noticias AFP Muhidin Alí, residente del sector donde explotó la bomba.
Un reportero de la BBC señaló que el hotel frente al que ocurrió la explosión colapsó y se cree que hay gente bajo los escombros de la edificación.
Yusuf Hassan, director del hospital de Madina, el principal de Somalia, donde llegaron la mayoría de los heridos, dijo que estaba impactado por la escala del ataque.
«Unas 72 personas fueron admitidas heridas en el hospital, de las cuales 25 estaban en graves condiciones. Otros habían perdido sus piernas y sus manos en el sitio de la explosión», aseguró
«Lo que pasó fue increíble. Nunca había visto algo parecido antes. Incontable cantidad de personas perdieron la vida. Los cadáveres estaban calcinados y era imposible reconocerlos», agregó.
BBC