Propuesta del consejal Madisson Godoy aprobada en votación plenaria
Roma, 22 de septiembre de 2010 – Gracias a una propuesta presentada antes de la pausa de vacaciones del 15 de agosto y después de una intensa discusión política, el Comune de Roma dió paso con recomendación, a la iniciativa que prevé la posibilidad para que los ciudadanos inmigrantes puedan tener acceso a las licencias para taxis al igual que los ciudadanos italianos.
La aprobación partió de una iniciativa del Concejal latinoamericano Madisson Godoy, en calidad de Presidente del Gruppo Consiliare Aggiunto del Comune di Roma, que documentó su pedido basándose en:
– La normativa de la Región Lazio del 1993, que en relación al “Transporte Público no de Línea” (así se llama el reglamento de los taxis), en la parte pertinente, no hace una diferencia entre ciudadanos italianos y extranjeros para que puedan obtener la licencia de taxistas, sino que más bien lo determina como un derecho que pertenece a todos los ciudadanos ( en manera general) sin distinción de origen.
Y en un segundo documento: una sentencia de un Juez de Florencia (Firenze) a favor de una ciudadano del Marruecos que había enjuiciado al Comune por haberle impedido de participar al concurso para la obtención de la licencia para taxista.
Además quedó establecida de forma explícita, que la administración municipal deberá realizar una gran campaña de comunicación, para informar a los interesados cuando y en que modalidad se realizará el próximo concurso para obtener la calificación como conductor de taxis, como paso previo para conseguir la licencia de trabajo.
LOS TAXISTAS DEBEN DAR RECIBOS IMPRESOS
El segundo resultado positivo, siempre gracias al Concejal extranjero fue la aprobación de una normativa que incide no solo a favor de los inmigrantes sino de la ciudadanía en general. Baste pensar a cuanto los turistas son estafados.
Se tratra del emendamiento N°- 558 BIS al Reglamento del Transporte Público no de Línea, que pasó con una votación de 48 votos a favor, ningún contrario y 6 abstenciones y que obliga a todos los taxistas a partir de los meses venideros, a dar un recibo impreso directamente del taxímetro, donde debe constar: el número del permiso del taxista, las placas del vehículo, el número de chilómetros recorridos, el precio total y la hora del servicio.
Gran reacción y espectativa ha causado en la ciudadanía y en los medios de comunicación locales y nacionales esta normativa y han sido muchas las asociaciones de consumidores que han expreso públicamente el reconocimiento y el respaldo a este emendamiento presentado por el Gruppo Consiliare Aggiunto y que algunos concejales locales lo han definido incluso como un capolavoro político. Una minoría de taxistas romanos oviamente no eran muy contentos con esta aprobación, la misma que marca un hito en cuanto al salto de cualidad política-administrativa de la figura del Consigliere Aggiunto.
El Alcalde de Roma, Gianni Alemanno ha definido la mencionada norma como “ importante y equilibrada ya que da garantías sea a los usuarios que ha los taxistas”. Es evidente por lo tanto el beneficio en términos concretos y económicos que mediante la aplicación de esta normativa se obtendrá en favor de todos quienes vivimos y trabajamos en esta ciudad.