Con la llegada del invierno, nuestra piel y nuestro pelo, se resecan más de lo normal, y es necesario muchas veces una dosis de hidratación extra. Además de los tratamientos hidratantes que utilizamos de manera habitual hoy voy a daros 8 recetas especiales de mascarillas caseras para que tanto la piel como el cabello, se sientan totalmente nuevos en los días de más frío. Aprovecha este puente para cuidar mucho más tu piel y tu cabello, y para darte un pequeño homenaje.
- ¿Tienes granitos y quieres que se sequen de manera rápida? Mezcla una cucharada de levadura de cerveza, 5 gotitas de zumo de limón y agua. Haz una pasta y mezcla todo hasta que quede bien densa. Aplica esta pasta en la zona de los granos y espera a que se seque unos 10 minutos. Después retira con agua templada y aplica tu tratamiento hidratante habitual.
- ¿Tienes la piel con un exceso de grasa y te salen brillos a todas horas? Aunque no es época de fresas, éstas pueden ayudarte a exfoliar la piel gracias a sus ácidos. Mezcla una cucharada de sopera de yogurt con 3-4 fresas. Tritura todo hasta que quede hecho un puré. Añade una cucharadita de maicena y unas gotas de miel. Termina mezclando todo en un recipiente y extiéndelo sobre la piel. Deja que actúe unos 10 minutos y después retira con agua tibia, y aplica tu crema hidratante habitual.
- ¿Necesitas un acondicionador especial para tu pelo? El aguacate puede ayudarte a recuperar los cabellos dañados o secos y dejarlos suaves y brillantes. Solo necesitarás la pulpa de un aguacate bien maduro, y espachurrarla con un tenedor. Aplícala sobre el pelo con la ayuda de tus manos, y después pasa un cepillo para que el aguacate se incorpore bien al cabello. Cubre la cabeza con un corro de ducha y deja que actúe durante unos 20 minutos. A continuación, lava tu pelo con tu champú habitual. Verás como notas que tu pelo está mucho más suave y revitalizado.
- ¿Quieres que tu piel esté más radiante, fresca e hidratada? Solo necesitarás un yogurt, dos cucharadas de avena y una cucharada de miel. Mezcla en un recipiente todo y aplica sobre la piel limpia. Deja que actúe durante unos 15 minutos. Después retira la mascarilla con agua tibia, y aplica tu hidratante habitual.
- ¿Quieres una mascarilla que te ayude a eliminar las células muertas de la piel en zonas como la espalda, los codos o las rodillas? Mezcla en un bol una taza de azúcar moreno, medio vasito de aceite de oliva y tres gotas de aceite esencial de lavanda o de rosa. Date un baño y después con la piel húmeda y con la ayuda de tus manos, extiende por todo tu cuerpo la pasta e insiste en las zonas más conflictivas de tu cuerpo. Una vez lo hayas hecho, enjuágate con agua templada. Verás como tu piel está mucho más suave y freca.
- ¿Quieres una dosis de hidratación en tu rostro? Lo conseguirás con esta mascarilla de mango. Extrae la pulpa de un mango maduro y machácalo con un cuchillo hasta que se cree una pasta. Añade una cucharada de azúcar. Ingredientes. Un mango. Una cucharada de postre de azúcar, y mezcla todo bien. Aplica sobre el cutis bien limpio y deja que actúe durante unos 10 minutos. Después retira con agua y aplica tu crema hidratante habitual.
- ¿Quieres conseguir una hidratación profunda para tener una piel más suave y luminosa? En un bol mezcla una clara de huevo, medio plátano, una cucharada de miel y dos hojas de menta. Bate las claras de huevo, y añade el resto de ingredientes para mezclarlos todos juntos, hasta que se forme una pasta homogénea. Aplica sobre el rostro totalmente limpio y deja actuar durante unos 15 minutos. Después retira con agua y aplica tu tratamiento hidratante habitual.
- ¿Tienes un cutis seco y mate? ¡Esta es tu mascarilla! Solo necesitas medio aguacate maduro, la yema de un huevo, unas 10 gotas de aceite de oliva y una cucharada pequeña de miel. Bate bien el huevo en un bol hasta que quede totalmente licuado. Añade el resto de ingredientes y mezcla todo bien hasta que tengamos una crema. Ponla sobre la piel y deja que actué durante unos 15 minutos. Después retira con agua y aplica tu tratamiento hidratante habitual.
Como ves, podemos cuidarnos en casa por muy poco. ¡Así que date un capricho!
Barbary Guiza
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