Para los periódicos italianos, detrás del masacre de Umbertide – Perugia está el Islam, no un hombre y su locura. Y desde hoy día habrá una historia más de miedo que contar, pero la realidad no es esa.
Roma, 12 Noviembre 2012- “Ella rechazaba el velo islámico, y asi él mata a los dos hijos, Ahmed e Jihane”.
Es así que la primera página del Corriere della Sera cuento hace algunos días la masacre de Umbertide, que ha visto Moustapha Hajjaaji, albañil de 44 años de orígenes marroquís, matar a su hija de 12 años Jihane y a su hijo de 8 años Ahmed y después intentar suicidarse. El epílogo del fracaso de su matrimonio con Naoual, que lo había abandonado.
El velo está como página principa y se vuelve noticia principal en los títulos de casi todos los periódicos nacionales. Como si a exterminar una familia hubiese sido la defensa de la ortodoxia islámica, en fin de cuentas dan la culpa al Islam y no la locura de un hombre. Como que quisieran decir que la tragedia deshumana que se ha descadenado la otra noche en esa casa en la provincia de Perugia sea el efecto de una causa que se podría encontrar facilmente muchas otras familias de inmigrantes.
El Hajjaji marroquí Mustapha, ahora en prisión por cargos de asesinato premeditado, el último adiós se realizo esta mañana, en una sala del hospital Santa Maria della Misericordia en Perugia.
Te preguntas entonces de donde salga esta convicción. Es siempre leyendo los periódicos que en la primera denuncia por maltratamiento presentadas por Naoual en contra del marido ella decía “también” la intención del marido en obligarle a ponerse el velo.
Los otros maltratamientos desaparecen ninguna dice lo que la mujer pasaba junto a ese hombre violento, el rechazo de una mujer de cubrirse la cara según nuestros mass media es una motivación más que suficiente para permitir a un hombre musulmán de asesinar a sus hijos cruelmente.
El caso, para quien da la opinión pública, ya está cerrado. Y en las casas, por las calles, en los bares y en los lugares de trabajo desde hoy habrá otra historia de terror que contar cuando se hablará de los musulmanes. Monstruos que odian a las mujeres y en nombre de Dios están listos para matar hasta a sus hijos.
“Ella lo había dejado. Él mata a sus hijos”, no habría tenido el mísmo efecto en los lectores. Reasumen así, podia parecer ante los ojos de los lectores un horror muy común o tal vez muy italiano?.
Elvio Pasca
Cristina Zambrano León
