Son el 9,8% de los ocupados, los que declaran reditos por 41,6 millones de euros, pero han sufrido particularmente la crisis y han ganado menos respecto a los italianos. La Relación Anual de la Fundación Moressa sobre la Economía de la Inmigración.
Roma, 12 Octubre 2012 – Los extranjeros representan un recurso para el territorio nacional sobre todo en este periódo de crisis: en Italia se cuentan más de 2 millones de trabajadores inmigrantes (el 9,8% del total de los ocupados), en sede de declaración de los ingresos notifican al fisco 41,6 millones de euros (par al 5,3% del total declarado) y pagan al Irpef 6,2 millones de euros (par al 4,1% del total del impuesto neto).
Pero representan la proporción de la población que más ha sido afectada negativamente por la crisis (la tasa de desempleo aumentó del 8.5% del 2008 en 2008, al 12.1% en el 2011), presentan mayores niveles de pobreza (42.2% de las familias extranjeras ven por debajo del umbral de la pobreza), y sus salarios son inferiores a € 300 en comparación con los trabajadores italianos.
Estos algunos de los resultados recogidos en la Relación Anual sobre la Economía de la Inmigración 2012 realizado por la Fundación Leone Moressa y patrocinada por la Organización Internacional para la Migraciones (OIM) y por el Ministerio de Asusntos de Exteriores, presentado el día de ayer en el Polo Humanista de la Universidad Ca’ Foscari de Venecia en el convenio del título “La inmigración en tiempo de crisis”. Aquí las tablas adjuntadas a la Relación.
EL MERCADO DEL TRABAJO. Desde el 2008 hasta el 2010 se ha asistido a un aumento de la tasa de desempleo extranjero de 3,5 puntos porcentuales pasando del 8,1% al 12,1% y alcanzando 310 mil inmigrantes sin trabajo.
Esto significa que en el bienio considerado un nuevo desocupado sobre tres tiene orígenes extranjeras. Por lo que concierne los ocupados (que son más de 2 millones), por la mayor parte se trata de trabajadores dependientes (86,7%), jóvenes, encuadrados como obreros (87,1%), de baja calificación profesional, en el sector de terciario (51,5%) y en empresas de pequeñas dimensiones (el 54,6% trabajan en empresas con menos de 10 personas).
RETRIBUCIÓN DE LOS DEPENDIENTES. Un dependiente extranjero gana al mes (dato del cuarto trimestre 2011) una cifra neta de 973 euros, más de 300 euros en menos respecto al colega italiano. Tiene más posibilidad de llevarse a casa una retribución más elevada el inmigrante que trabaja en el sector de los transportes (1.257 euros al mes) al contrario de los que trabajan en servicios para las personas (717 euros al mes), donde estan ocupadas mayormente las mujeres.
INGRESOS DECLARADOS E IRPEF PAGADO. En Italia se cuentan en total 3,4 millones de contribuyentes que han nacido en el exterior (datos referidos a los ingresos del 2010) que declaran casi 42 millardos de euros: traducidos en términos relativos, se trata del 8,2% de todos los contribuyentes y del 5,3% de los ingresos en total declarados en Italia.
Los extranejros declaran mediamente 12,481 euros (7 mil en menos respecto a los italianos) y se trata casi exclusivamente de ingresos por trabajo dependiente. En el 2010 los que han nacido en el exterior han pagado el Irpef 6,2 millardos de euros (para al 4,1% del entero Irpef pagado a nivel nacional) que se traduce en 2.956 euros por cabeza. Pero los extranjeros benefician, más de los italianos, de detracciones fiscales por causa principalmente del bajo importo de los mismos ingresos: sin embargo el 63,9% de los nacidos en el exterior que declara ingresos paga efecticamente el Irpef, contra el 75,5% de los nacidos en Italia.
NIVELES DE POBREZA. El 42,2% de las familias extranjeras vive bajo el límite de pobreza (datos 2010), contra el 12,6% de las familias italianas. Los ingresos que tienen no les permite ahorrar, apenas 600 euros al año, desde el momento que los consumos son casi como las entradas familiares. Entrada que provienen por el 90% por trabajo dependiente y que vienen destinadas, entre otras cosas, al pago de alquiler, desde el momento que apenas el 13,8% de las familias extranjeras es propietaria de la habitación de residencia.
DIFICULTAD ECONÓMICA. Las familias extranjeras declaran mayores dificultades económicas respecto a aquellas italianas (datos 2009): el 21,6% dice de llegar a fin de més con mucha dificultad (contra el 14,5% de las italianas), el 23,4% se ha atrazado con el pago de las facturas (8,2%), el 60,1% no está en grado de afrontar un gasto inesperado de 750 euros (31,4%) y el 53,6% no puede permitirse una semana de vacaciones (39,2%).
“No obstante el periódo de crisis”, ha afirmado el director de la Oficina de Coordinación para el Mediterráneo el OIM, José Ángel Oropeza, “nadie puede negar el contributo que los inmigrados han dado y dan a Italia y al desarrollo del País.
Después de todo la migración es un fenómeno epocal que concierne a todo el mundo de frente al cual es necesario que los gobiernos escojan que hacer: adoptar una política de cierre o como sugerimos nosotros, promover más bien una política de apertura, reconociendo el rol de las migraciones como parte integrante de la economía mundial de los migrantes como componentes esenciales para la plena recuperación de la crisis económica contemporanéa”.
Scarica le tabelle allegate al Rapportoù
C.Z.León