Miles de personas acudieron hoy al acto religioso.
Roma, miércoles 28 de marzo de 2012 – La plaza de la Revolución de La Habana, el escenario de los actos de masas y las grandes concentraciones revolucionarias acogió hoy miércoles a decenas de miles de personas para la santa misa celebrada por Benedicdto XVI.
Cientos de miles de cubanos, católicos, comunistas ateos, adeptos a la santería, siguieron la ceremonia presidida por el Papa. “Cuba y el mundo necesitan cambios. Se darán sólo en el camino de amor, sembrando reconciliación”, aseguró Benedicto XVI.
El gobierno por su parte le indicó a los disidentes que no tolera manifestaciones políticas. Antes de la ceremonia detuvieron a varias Damas de Blanco. La líder de Damas de Blanco, Berta Soler, ha dicho días atrás que han recibido “amenazas” para que no acudan a la plaza de la Revolución, pero que iba a ir a la misa.
Unas palabras del Papa fueron interpretadas en favor de los presos cubanos y a la reconciliación nacional. Fue en el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de Cuba, ante la que Benedicto XVI, pidió “por las necesidades de los que sufren, de los que están privados de libertad, separados de sus seres queridos o pasan por graves momentos de dificultad”.
Asímismo, el Papa, se refirió a todos los cubanos, se encuentren “cerca o lejos” y pidió que se avance “por caminos de renovación y esperanza”.
Ayer en La Habana, el presidente cubano, Raúl Castro, le indicó a Benedicto XVI su compromiso con las reformas solo en el sector económico, no en el político, como indicó también ante la prensa internacional el vicepresidente del gobierno cubano, Marino Murillo.
De otra parte, cuatro barcos de exiliados cubanos residentes en Miami partieron el martes al mediodía desde Florida y se ubican a 20 km de La Habana. Planean celebrar una misa en aguas internacionales y hacer sentir su presencia con fuegos de artificio.