El 30% de las personas con edades comprendidas entre 25 y 30 años es un extranjero, pero las nuevas ingresos de inmigrantes no ayudan al crecimiento de la población
Roma, 23 de agosto de 2010 – El 25% de los recién nacidos es hijo de extranjeros y casi el 30% de los jóvenes entre 25 y 29 años es un inmigrante. Este es el resultado de la investigación en la oficina de registros sobre el crecimiento demográfico en Torino en los últimos seis años.
A pesar del elevado número de nuevos ingresos de inmigrantes, en Italia no se logra sostener el crecimiento de la población. Especialmente en Torino, que a pesar de los 88.394 extranjeros que viven actualmente allí, los residentes han aumentado de tan solo 7.954 unidades.
Para la oficina de registros de esta provincia del Piemonte, que ha realizado un estudio exhaustivo sobre el crecimiento de la población desde el 2003 hasta el 2009 «ha llegado al punto de no retorno demográfico”.
Ahora ya no son suficientes sólo inmigrantes extranjeros, de hecho, la encuesta muestra que las mujeres inmigrantes tienen aún menos hijos que sus compatriotas que viven en el país natal: registrando una disminución de la tasa de fecundidad del 0,6%, pasando de 2,7 en el 2004 a 2,1 en el 2008. Si los datos se analizan en relación a la de las mujeres italianas, aún más contrarias a formar una familia, llegamos a una cifra media de 1,4, un valor mucho más bajo que el estimado del 2,8% que permitiría al menos el «crecimiento cero».
Paralelamente disminuyen los jóvenes entre 25 y 29 años (19,4%) y aquellos entre 30 y 34 (16,1%), mientras los over 79 años han aumentado en un 24% que corresponde a una cuota de 60.571 en comparación con los 48.789 en 2003.
Actualmente casi la mitad de las mujeres educan los hijos solas. Las familias compuestas solo por la madre, de hecho, son del 41,5% del total. El registro ha estudiado 14.404 casos: 17,4% son mujeres extranjeras. En la mayoría de los casos son inmigrantes procedentes de Rumanía, Marruecos, Perú y Nigeria.
