La Guardia Costera italiana ha recuperado el día de ayer decenas de cadáveres.
A menos de una semana de la última tragedia de 400 inmigrantes que trataban de llegar a Europa por el mar Mediterráneo, otro barco abarrotado de personas se hundió este domingo 19 camino a las costas italianas y las autoridades creen son cerca de 700 los fallecidos.
Son cada vez más y más los barcos que en las últimas semanas, considerando la llegada de la primavera, han tomado ruta Europa. Los Guardacostas italianos trabajan día y noche, prestando socorso a los barcos.
Según contó la vocera del ACNUR, Carlotta Sami, a la agencia de la ONU para los refugiados en Italia, los Guardacostas recibieron a horas de la madrugada una llamada de socorro de un barco que llevaba unos 750 inmigrantes que había zarpado de Libia.
Como no había ningún barco de la Guardia Costera italiana en la zona, el Centro Nacional de Socorro pidió al barco mercante portugués King Jacob, que navegaba cerca del Canal de Sicilia, desviandose hasta el lugar para prestar ayuda.
Cuando el buque se aproximaba a la embarcación, los inmigrantes, desesperados, «se colocaron todos en el mismo lado de la nave y provocaron su hundimiento», según relató Sami, citada por la agencia de noticias EFE.
El buque portugués intentó salvar a los inmigrantes que habían caído al agua, pero sólo logró sacar a 28 personas. Más tarde la Guardia Costera italiana, la Guardia de Finanza y la Marina Militar y de la Armada de Malta alcanzaron a recuperar 24 cuerpos ya inertes.
«Si se confirman estas cifras, en los últimos días habrían muerto más de 1.000 inmigrantes», sentenció Sami, citada por la agencia de noticias EFE.
A.Pinate
