Desde el 1 de enero de 2019, llega un nuevo impuesto para los extranjeros sobre la transferencia de dinero que envian a sus países de orígen y fuera de Europa.
Con el nuevo impuesto en vigor, el costo de una transferencia de dinero a países que no pertenecen a la Unión Europea podría llegar a más del 7% entre las comisiones y el nuevo impuesto
De hecho ha sido aprobada una enmienda sobre el decreto fiscal 2019 vinculada a la Ley de Presupuesto (Artículo 25-bis del Decreto Ley No. 119/2018), que establece que se aplicará un impuesto equivalente al 1,5% a las transferencias individuales de dinero de Italia a países no pertenecientes a la Unión Europea.
La controversia se desató porque el nuevo impuesto, propuesto por el partido político La Lega, es considero discriminatorio por las oposiciones, ya que los inmigrantes utilizan este método de transferencia de dinero para enviar el dinero a sus familias.
Esta tasa pesará especialmente a los trabajadores bangladesíes, filipinos, latinos, senegaleses e indios.
La nueva tasa
Además de la comisión que se aplica al momento en que se transfiere el dinero, también se aplicará un impuesto del 1,5% a partir del 1 de enero de 2019 en cada transacción realizada con el sistema de transferencia de dinero a países no pertenecientes a la UE.
El importe/tasa mínima establecida por la norma en cuestión es de 10 euros.
Todas las transacciones comerciales se excluirán de los impuestos, ya que es poco probable que una transacción comercial se liquide con esta forma de pago. Según las indicaciones del Gobierno, esta maniobra financiera aportaría alrededor de 60 millones de euros de entrada al Estado.
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