Estaría basada en la sensación que promueve el vínculo entre una madre y su hijo.
Roma, 28 Septiembre 2012 – La atracción por el ser humano con los senos es única, pues los hombres son los únicos mamíferos fascinados por los pechos en un contexto sexual y las mujeres son los únicos mamíferos cuyos senos aumentan independientemente del embarazo.
El neurocientífico Larry Young y el escritor Brian Alexander escribieron un libro titulado «The Chemistry Between Us: Love, Sex and the Science of Attraction»,donde proponen una explicación lógica para esta extraña fijación.
La explicación sería neurológica y está relacionada con los mecanismos cerebralesque promueven el vínculo entre una madre y su hijo.
«Cuando una mujer da a luz, el recién nacido se dedica a realizar elaboradas manipulaciones de los pechos de su madre. Esta estimulación envía señales al cerebro. Allí, desencadenan en la liberación de un neurotransmisor llamado oxitocina desde el hipotálamo del cerebro”, afirman.
La oxitocina imprime el rostro, olor y sonidos en el circuito de recompensa del cerebro de la madre y es así como se forja la relación madre-hijo.
«Bromea todo lo que quieras, pero nuestra fascinación con los senos, lejos de ser rara, es un impulso inconsciente evolutivo que nos llama a activar los circuitos de unión de gran alcance que ayudan a crear un vínculo amoroso», finalizaron los autores.
-Repubblica-
C.Z.León