La Eurocámara ha dado un rotundo sí a Ursula von der Leyen, aprobando su segundo mandato como presidenta de la Comisión Europea con 401 votos a favor, superando ampliamente los 360 necesarios. A pesar de un contexto político volátil y un voto secreto, Von der Leyen ha logrado asegurar su continuidad al frente de la Comisión, arrancando con una Unión Europea sumida en múltiples crisis y un Parlamento Europeo más polarizado que nunca.
Un Apoyo Amplio pero Dividido
Con el respaldo de Populares, Socialdemócratas, Liberales y Verdes, Von der Leyen ha conseguido una mayoría más amplia que en 2019, cuando apenas obtuvo la aprobación por nueve votos. A diferencia de entonces, la cristianodemócrata alemana ha asegurado su reelección sin el apoyo de Giorgia Meloni y su partido. Con un discurso equilibrado y promesas amplias, ha logrado convencer a más de la mitad de los eurodiputados. Entre sus compromisos están el refuerzo del control de fronteras externas, el impulso de una UE de la Defensa y la priorización del acceso a la vivienda.
La Estrategia del Discurso Generalista
En su intervención antes de la votación, Von der Leyen se mostró más confiada y con un discurso el doble de extenso que hace cinco años. Aunque evitó profundizar en el cambio climático, una de sus banderas durante su primer mandato, obtuvo el apoyo mayoritario de los Verdes. Los Conservadores y Reformistas (ECR), incluyendo a los Hermanos de Italia de Meloni, votaron en su contra. El respaldo de los 53 eurodiputados ecologistas resultó crucial para Von der Leyen, quien ha adoptado una agenda climática más moderada que en 2019, aunque aseguró que el Pacto Verde Europeo seguirá su curso.
Promesas para los Primeros 100 Días
Von der Leyen prometió la implementación de un Pacto para una Industria Limpia en sus primeros 100 días. Los Verdes, debilitados tras las recientes elecciones europeas, optaron por apoyarla, considerándola la opción menos mala para frenar a la extrema derecha. En 2019, se abstuvieron cuando la agenda verde era su prioridad máxima, pero ahora cambian su postura en un contexto donde la lucha climática ha perdido prioridad en la Comisión.
Compromisos Sociales y Económicos
Dirigiéndose a los Socialdemócratas, Von der Leyen prometió una cartera para una Comisión responsable de Vivienda y un plan de acción europeo sobre vivienda sostenible, una agenda con intenciones loables pero de impacto limitado debido a que esta competencia es exclusivamente nacional. Iratxe García Pérez, líder de los socialdemócratas en el Parlamento, celebró que las políticas de la Comisión sean las más sociales y ecológicas de la historia, destacando un compromiso claro de no cooperar con la extrema derecha.
Un Enfoque en Seguridad y Defensa
Para apaciguar a los suyos y contrarrestar el discurso endurecido del Partido Popular Europeo sobre migración, Von der Leyen anunció la creación de un mercado interior para la Defensa, un puesto de comisario para el Mediterráneo y otro para la Defensa, el primer escudo aéreo europeo, y un aumento significativo del personal de Europol y Frontex. «Ha llegado el momento de construir una UE de la Defensa», afirmó.
Una Europa Más Polarizada
La nueva legislatura comienza con una Eurocámara más polarizada y una mayor presencia de fuerzas radicales y euroescépticas. Von der Leyen se comprometió a defender la libertad y el respeto del Estado de derecho, enfrentándose a la extrema derecha. Su mandato promete una lucha firme contra los extremistas y un enfoque en contrarrestar la desinformación y las injerencias externas mediante la creación del primer estudio europeo sobre el impacto de las redes sociales en jóvenes y un «escudo europeo de la democracia».
Con un nuevo ciclo que se proyecta desafiante, Ursula von der Leyen inicia su segundo mandato con el reto de navegar una Europa dividida y en crisis, buscando equilibrar las diversas demandas políticas y sociales en un Parlamento cada vez más fragmentado.
