Según el último informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Libia, publicado en la red social X, la ruta del Mediterráneo central sigue siendo una de las más letales para las personas migrantes. Desde el 1 de enero hasta el 19 de abril de 2025, al menos 114 personas han perdido la vida y 180 están desaparecidas mientras intentaban llegar a Europa por mar.
Durante ese mismo periodo, la OIM informa que 6.620 migrantes fueron interceptados en el mar y devueltos a Libia. De ellos, 5.663 son hombres, 622 mujeres, 230 menores de edad, y 105 personas no registran datos de género.
Estas cifras reflejan la gravedad de una situación humanitaria persistente, en la que los migrantes se ven forzados a arriesgar sus vidas por falta de vías seguras y legales de acceso. Las políticas de devolución y las operaciones de interceptación plantean serias dudas sobre el respeto a los derechos humanos fundamentales y la eficacia de las medidas destinadas a combatir la migración irregular.
La OIM vuelve a hacer un llamado a la comunidad internacional para que se implementen soluciones estructurales y coordinadas, que prioricen la protección de la vida humana y la asistencia a las personas más vulnerables.