El Gobierno italiano designará a un comisario especial para gestionar los recursos hídricos ante el temor a que se registre una nueva sequía el próximo verano, después de vivir una de las más graves el pasado año.
Tras una reunión del gabinete en la que han participado tanto la primera ministra, Giorgia Meloni, como los ministros de Asuntos Europeos, Medioambiente, Infraestructuras, Agricultura y Protección Civil, el Ejecutivo se ha comprometido a promulgar un decreto ley que otorgue poderes ejecutivos a este nuevo comisario. También se definirá un plan hídrico, acelerará las obras indispensables para hacer frente a la sequía y lanzará una campaña de sensibilización, de acuerdo con una nota difundida este miércoles tras el encuentro técnico.
Según los medios de comunicación, los miembros del Ejecutivo reconocieron que la falta de agua es un problema enquistado en varios territorios de Italia y su solución no será inmediata. El verano pasado Italia sufrió la peor sequía en setenta años y vio cómo su principal río, el Po, que atraviesa el norte desde los Alpes al Adriático, se secó, causando a lo largo de su caudal limitaciones hidrológicas en ciudades y campos de cultivo.
«Debemos prepararnos para otro verano crítico», avisó la semana pasada el responsable de la Autoridad de las Reservas de los Apeninos Centrales, Marco Casini, defendiendo «la necesidad de poner en marcha desde ya medidas que afronten posibles situaciones de crisis».
Te puede interesar:
