La pareja de peruanos según las investigaciones habría intentado desesperadamente escapar, pero lamentablemente habrían colapsado justo al pie de la cama. Probablemente desorientados por el humo tras despertarse sobresaltados y aturdidos por la repentina falta de oxígeno, no tuvieron fuerzas para escapar de la casa en llamas ni para pedir ayuda.
Así murió un hombre peruano de 46 años de origen peruano Josè Gabriel Salazar Cordova y su novia Carmen Julia Pumachares Hilarion, cuatro años mayor, atrapados en su apartamento en via Fratelli Rizzardi, entre la Gallaratese y el parque Trenno en Milán. La alarma según los invetigadores la dio ayer por la tarde el hijo de 27 años de la mujer que escuchó por última vez a su madre en la noche de fin de año y que a partir de ese momento no pudo contactarla.
Lamentablemente ya era demasiado tarde: los bomberos para entrar en el apartamento rompieron una ventana y encontraron los dos cuerpos en el suelo del dormitorio; también encontraron muerto al perro de la pareja. Al encontrar los cuerpos iniciaron las investigaciones, para conocer la dinámica de la muerte de la pareja peruana y su perro, actualmente se piensa que la muerte sea a causa de la inhalación de monóxido de carbono. Según la información inicial, la muerte de Josè Gabriel y Carmen Julia, habría sucedido, al menos 24 horas antes del descubrimiento de sus cuerpos sin vida; de hecho siguiendo las declaraciones de las familias de la pareja peruana el hecho que no hayan tenido noticias de ellos desde Año Nuevo sugiere que la muerte ha ocurrido, justo en la noche del sábado, entre el 31 de diciembre y el 1 de enero.
Las llamas habrían iniciado por unas velas colocadas cerca del sofá en la sala del apartamento y se habrían autoextinguido sin extenderse al resto de la casa (la cama estaba intacta), sin embargo habrían consumiendo todo el oxígeno del interior de la casa. Josè Gabriel tenía cuatro hijos, uno de ellos declaró: «No teniendo noticias de mi padre y su pareja – explica el segundo hijo Gabriele – en los últimos días intentado contactar a los hospitales para obtener información, pero nadie sabía nada». Así ayer por la tarde, el hijo del peruano habría ido a la casa de la pareja e habría intentado abrir la puerta, que sin embargo estaba cerrada por dentro. En ese momento habría llamado al 112, al llegar los agentes se encontraron frente a los dos cuerpos sin vida. El fiscal de turno ordenó la autopsia.
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