En un discurso conmemorativo del Día de la Memoria en el Quirinale, el Presidente de la República italiana, Sergio Mattarella, ha recordado el horror del Holocausto, señalando que el exterminio de los judíos fue «el crimen más abominable». Mattarella destacó que Auschwitz abrió sus puertas a un «horror absoluto, sin precedentes», alimentado por ideologías basadas en el mito de la raza, el odio, el fanatismo y la prevaricación.
El presidente instó a rechazar el odio, especialmente ahora que se están manifestando «peligrosas formas de antisemitismo». Subrayó la importancia de buscar la paz, reconociendo el derecho del pueblo palestino a tener su propio Estado en la actualidad, mientras el conflicto entre israelíes y palestinos alcanza niveles críticos.
El discurso de Mattarella adquiere una relevancia significativa en medio del peor conflicto entre israelíes y palestinos, condenando la indiferencia y llamando al respeto de los derechos de todos. También recordó cómo Italia, durante el fascismo, adoptó «ignobles leyes racistas» en un contexto de indiferencia, y cómo miembros de la República de Salò colaboraron en la captura, deportación y atrocidades contra los judíos.
Mattarella insistió en la responsabilidad, citando a Primo Levi y advirtiendo contra ideologías de superioridad racial, nacionalismo predatorio y culto a la personalidad, calificándolos como «virus mortales». En el salón lleno de imágenes del Holocausto, hizo un llamado a aprender de la historia para evitar repetir los errores del pasado.
El presidente aseguró que la República italiana no tolerará amenazas ni intimidaciones contra las comunidades judías y llamó a prevenir el odio y la intolerancia en todo el mundo. En un día dedicado a la memoria, recordó la valentía de los ‘Justos’ que señalaron un camino diferente, lejos del odio y la opresión, basado en el sentido de humanidad.
Mattarella dirigió un llamado a Israel para buscar la paz y condenó la acción de Hamas el 7 de octubre como una «replica espeluznante de los horrores del Holocausto». Expresó angustia por los rehenes y las víctimas civiles palestinas en Gaza, destacando la reciente decisión de la Corte de La Haya de no archivar la acusación de genocidio contra Israel formulada por Sudáfrica, una decisión que calificó como dolorosa.
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