El referéndum del 8 y 9 de junio podría permitir que más de 1,4 millones de extranjeros no comunitarios soliciten la ciudadanía italiana en menos tiempo. Actualmente se requieren 10 años de residencia continua, pero el referéndum propone volver al límite anterior de 5 años, como establecía la ley de 1912.
Según el Centro de Estudios Idos, los posibles beneficiarios incluyen 1,1 millones de adultos con permiso de residencia de larga duración y 284.000 menores, algunos de los cuales obtendrían la ciudadanía automáticamente si sus padres la adquieren.
La estimación excluye ciudadanos de la UE (que ya pueden solicitar la ciudadanía tras 4 años) y personas que no cumplen los requisitos de ingresos o vivienda. Esta reforma podría tener un gran impacto social y facilitar la integración de muchos residentes de larga duración.