Tras la nueva ley para los influencers, Chiara Ferragni expresa satisfacción por el proyecto de ley sobre la caridad aprobado por el gobierno, mientras que expertos plantean preguntas sobre la necesidad de una nueva ley separada.
El Consejo de Ministros recientemente dio luz verde al proyecto de ley sobre la Caridad, comúnmente conocido como el proyecto de ley Ferragni, una medida destinada a regular la venta de productos cuyos ingresos están destinados a iniciativas benéficas. La ley impone nuevas reglas para garantizar transparencia y control, llenando un supuesto vacío normativo. Chiara Ferragni, la famosa influencer italiana recientemente involucrada en controversias relacionadas con el «Pandorogate» y acusada de fraude, ha acogido con satisfacción la iniciativa, destacando la importancia de la transparencia en el ámbito de las actividades benéficas.
El Ministro de Empresas y Made in Italy, Adolfo Urso, explicó que la medida obliga a los fabricantes y profesionales a indicar claramente en el embalaje o mediante etiquetas específicas el monto total o el porcentaje destinado para la caridad. Según el gobierno, esta medida proporciona a los consumidores información detallada sobre los fondos destinados a fines benéficos.
La ley también establece que los fabricantes y los influencers deben comunicar previamente a la Autoridad de Competencia y Mercado las actividades promocionales benéficas, indicando el período de entrega de los fondos al beneficiario. La Autoridad misma se encargará de supervisar el cumplimiento de estas obligaciones, con multas que pueden variar de 5 a 50 mil euros, de las cuales el 50% se destinará a fines benéficos.
Sin embargo, varios expertos legales plantean dudas sobre la necesidad de una ley separada, señalando que hubiera sido posible intervenir directamente en el Código del Consumidor. Carlo Edoardo Cazzato, abogado y coordinador de la práctica de Antimonopolio y Regulatorio, cree que la ley introduce elementos redundantes y sostiene que hubiera sido suficiente ampliar la lista negra de prácticas comerciales incorrectas.
Cazzato destaca la importancia de la transparencia y la comunicación con la Autoridad de Competencia, pero enfatiza las sanciones menos severas en comparación con las prácticas comerciales incorrectas. A pesar de las reservas de los expertos, la ley ha sido recibida positivamente por Chiara Ferragni, quien comentó la medida como un paso importante para llenar un vacío legislativo.
Finalmente, queda por ver cómo esta ley afectará concretamente las actividades de los influencers. Ferragni misma ha subrayado que será necesario esperar las indicaciones operativas que surgirán de las discusiones en curso en la Agcom, la Autoridad de Garantías en las Comunicaciones, en los mismos días de la aprobación del proyecto de ley de Caridad.
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