Inclinados, reverenciando su cuerpo. Así se despidió todo el equipo médico a Liang Yaoyi, un niño chino de 11 años que falleció y donó sus órganos.
China, 31 de marzo 2015 – Reverenciando su cuerpo, así se despidió el equipo médico de Liang Yaoyi, un niño de 11 años que falleció y donó sus órganos a otros niños que los necesitaban, un gesto altruista que emocionó a los doctores y enfermeras.
Esta imagen personal y conmovedora, es una de esas que no deseamos ver nunca, la despedida de un niño fallecido; que al mismo tiempo es inconmensurablemente educativa, altruista y contradictoria ya que te llena de tristeza el “hasta luego” y al mismo tiempo de esperanza por la historia altruista que captura este momento.
La poderosa fotografía ha sido publicada esta semana por el Daily China, a pesar que la misma haya sido tomada meses atrás. El diario cuenta la historia de Lianhg Yaoyi, un niño de 11 años de Shenzhen (China), que murió a causa de un cáncer en el cerebro que le fue detectado dos años atrás. El niños era uno de los alumnos más destacados de su curso, a pesar de que su enfermedad le impidió asistir a clase con regularidad.
Cuando los médicos le dijeron que no podían hacer nada más por él, Yaoti demostró una gran sentido de altruismo y madurez, pidiendo que sus órganos fueran donados ha aquellos que los necesitaran. Así, en el momento en que fallece, antes de ser llevado al quirófano para que le extrajeran el hígado y los riñones a donar, el equipo medico hiso reverencia al cuerpo del niño.
En declaraciones que recoge el medio británico Mirror, la madre del pequeño declara como el hijo explicó que donar los órganos “era otra forma de seguir vivo”, indicando que “Hay mucha gente haciendo cosas extraordinarias en el mundo. Yo también quiero hacer algo bueno, y también quiero ser un buen chico”.
Foto:Diario Correo
A.Pinate
