El niño después de que su Madre suicida peruana lo lanzó por la ventana en Génova está vivo y es un milagro.
Génova 6 Marzo 2013 – Los vecinos lo ven de vez en cuando jugar en el patio, con el papá, o la abuela. Un niño que mira su mundo así: gatos metidos entre las llantas de los coches, los carros grandes que para él parecen de juguete, las hormigas que hacen fila para crear sus casas hoja a hoja. Un niño de cuatro años, que se ríe y hace expresiones de asombro frente a casi todo, que alza la cabeza para buscar ojos adultos.
Ale es un niño como otros. Y esto es lo que lo convierte en un milagro que camina.
Porque el pequeño corretea de arriba para abajo con su coche de juguete, en via Chiabrera en el popular barrio de Legino, a Savona, hace menos de seis meses fue lanzado de un edificio de seis pisos, en vía Ceccardi, en el centro de Génova.
Un vuelo al vacío de veinte metros, quien lo lanzó fue su madre, Margarita Soledad, peruana, que después de haber leido un pasaje de la biblia ella también se lanzó y en el impacto murió.
Han pasado casi seis meses del gesto aparentemente sin sentido terrible y cruel hecho de crónica que conmociono a Génova y toda Italia 27 de septiembre 2012. Seis meses en los cuales Alessandro ha luchado por su vida, actualmente Ale volvió a casa de su Papá a Savona.
