La circulación de trenes en Italia sufrió este viernes importantes interrupciones y retrasos debido a la huelga convocada por varios sindicatos ferroviarios para reclamar mejoras en las condiciones de los trabajadores del sector, e incrementar la seguridad del personal que opera de cara al público.
El seguimiento del paro, que se ha alargado desde las 9.00 horas locales hasta las 17.00 (7.00-15.00 GMT), ha variado en función del momento de la jornada, llegando a lograr picos cercanos al 100 % de trabajadores en huelga, según fuentes sindicales recogidas por los medios locales. La protesta, secundada por los sindicatos Filt Cgil, Fit Cisl, Uiltrasporti, Ugl Ferrovieri, Orsa Ferrovie y Fast Confsal, logró detener, a las 12.00 horas (10.00 GMT), a la totalidad del personal de oficinas de la compañía ferroviaria pública italiana Trenitalia y a casi un 80 % del personal que trabaja a bordo de los trenes.
En el centro de las protestas se encuentran las reclamaciones por la precarización de las condiciones laborales del personal de Trenitalia, que señala, entre otros, la falta de seguridad en sus puestos de trabajo y las dificultades para conciliar su vida familiar. «Hacemos huelga para mejorar las condiciones de trabajo, un plan de contratación adecuado, un mejor equilibrio de los turnos del personal ferroviario, la conciliación de la vida laboral y familiar», detalló el sindicato Filt Cgil en sus redes sociales.
También los empleados de Trenord, que gestiona la circulación en la región norteña de Lombardía, se sumaron a la huelga, afectando a muchas de las líneas ferroviarias que dan servicio a la ciudad de Milán. A lo largo del día se han producido importantes filas y acumulación de pasajeros en las principales estaciones ferroviarias del país que intentaban acceder a los escasos trenes con circulación garantizada por los servicios mínimos.
Ante la previsión de aglomeraciones, el principal operador ferroviario de Italia recomendó a los usuarios del servicio informarse antes de acudir a las estaciones de tren y planificar sus viajes teniendo en cuenta que la circulación de trenes se podría ver afectada más allá de las franjas de protesta.
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