La comisión de Justicia de la Cámara de los Diputados italiana recibió hoy tres proyectos de ley que declararán un «delito universal» la maternidad subrogada realizada en el extranjero y empezará a estudiarlos previsiblemente esta semana.
Las propuestas han sido «unificadas», ya que proceden de los tres partidos que gobiernan, los ultraderechistas Hermanos de Italia y la Liga, de la primera ministra Giorgia Meloni y su vicepresidente Matteo Salvini, respectivamente, y la conservadora «Forza Italia» de Silvio Berlusconi.
«Toda la derecha está de acuerdo en hacer de la maternidad subrogada un delito universal», declaró la diputada de Hermanos de Italia Carolina Varchi, primera firmante de uno de los textos.
La comisión prevé iniciar el examen de los proyectos de ley durante esta semana, dando inicio así a su tramitación parlamentaria, en un momento en el que en Italia se habla mucho sobre esta práctica. El objetivo de la popuesta es «contener el turismo de procreación y el negocio del cuerpo femenino y de los niños», en palabras de la propia Varchi.
Lo hará ampliando una ley de 2004 que ya prohibía en el país «la realización, organización, publicación o comercialización de gametos o embriones» o la maternidad subrogada con penas de hasta dos años de cárcel y multas de hasta un millón de euros. Es decir, en Italia el recurso a «vientres de alquiler» es ilegal tanto para parejas heterosexuales como homosexuales, pero ahora se quiere también perseguir a quienes lo hagan en el extranjero.
Para ello, la derecha pretende añadir a la mencionada ley la frase «las penas establecidas en el presente artículo se aplicarán también si los hechos se cometen en el extranjero».
La pasada semana, el Gobierno conservador, en el poder desde el pasado octubre, ordenó al ayuntamiento de Milán (norte), en manos del alcalde progresista Beppe Sala, que dejara de incluir en su Registro Civil como hijos de parejas del mismo sexo a niños nacidos en el extranjero, para indignación de la oposición de izquierdas.
Actualmente Italia padece un gran vacío legislativo en temas como este y solo se permite registrar al padre o madre biológicos, mientras que la pareja puede sólo adoptar al niño con un proceso judicial. Los ataques desde el área del Gobierno a la maternidad subrogada no han cesado y ayer mismo el diputado de Hermanos de Italia Federico Mollicone aseguraba que esta práctica era «un delito más grave que la pederastia».
La ministra de Familia, Eugenia Roccella, conocida por su posición contra las familias LGBT, llegó a ironizar sobre los hijos fruto de maternidad subrogada al considerar que deberían celebrar dos veces el día de la madre, en respuesta a un opositor. La llegada de estas tres propuestas «unificadas» a la Comisión parlamentaria recibió inmediatamente el aplauso del Movimiento Pro Vida y Familia, que esperó que su tramitación y entrada en vigor «sea rápida».
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