La decisión está tomada: se modifica el nuevo decreto en Italia, aprobado el pasado 6 de marzo. Las nuevas prohibiciones contra el coronavirus podrían entrar en vigor el próximo fin de semana.
El Gobierno de Mario Draghi convocó esta mañana al Comité Técnico-Científico para consultar las nuevas medidas. Y los expertos ya han emitido sus indicaciones: reforzar las medidas restrictivas en las zonas amarillas, imponer cierres en fin de semana como ocurrió durante las vacaciones de Navidad, imponer las máximas restricciones en las zonas rojas para minimizar la circulación de personas y favorecer el rastreo de contactos.
El boletín diario, con 13.902 nuevos casos y 318 víctimas mortales, confirma la subida de la curva con una tasa positiva que llega a 7,5. Italia superó ayer los 100.000 fallecidos con coronavirus desde que empezó la emergencia en el país, en febrero de 2020, confirmó el Ministerio de Salud.
«Nunca habríamos pensado que un año después, al hacer el recuento oficial de víctimas, nos encontraríamos en el terrible umbral de los 100.000 muertos», declaró el primer ministro Draghi. El presidente italiano, Sergio Mattarella, de 79 años, se ha vacunado hoy, un acto que dijo debería ser «un deber» para los italianos.
El Covid-19 continúa por tanto propagándose por el país transalpino. Desde el Palacio Chigi consideran que las nuevas medidas son muy necesarias «para mitigar y contener el virus», subrayan «el cambio progresivo en el cuadro epidemiológico» e instan a los expertos del Comité a aportar sus indicaciones.
El viernes pasado, tras analizar el seguimiento semanal, el Instituto Superior de Salud consideró «imprescindibles» reglas más estrictas para contrarrestar «el aumento sostenido en la circulación de algunas variantes virales con mayor transmisibilidad«. Esta es la línea que ya había compartido el Comité -a pesar de la resistencia de los gobernantes-, el parámetro de 250 contagios de cada 100 mil para cerrar escuelas, pero también comercios y lugares de reunión.
Los científicos han destacado repetidamente la necesidad de limitar el movimiento y el contacto entre personas para contener la transmisión del virus. Por ello, reiteran que en todos los municipios donde se decrete la zona roja, será necesario adoptar el «modelo Codogno» con derecho a salir de casa solo por «necesidades comprobadas» (motivos de trabajo, salud y urgencia). Medidas extremadamente estrictas que prevén el cierre de todas las actividades «no esenciales».
CIERRE TOTAL EL FIN DE SEMANA Y MEDIDAS DURAS PARA LA ZONA AMARILLA
Los expertos han recomendado el cierre en toda Italia durante el fin de semana, cuando la circulación de ciudadanos aumenta inevitablemente. En este caso, sin embargo, la decisión debe ser política porque prevé el cierre de tiendas y especialmente de bares y restaurantes también en la franja amarilla, en la que ahora están abiertos los lugares públicos hasta las 6 de la tarde. Se permitirá la entrega de alimentos y bebidas a domicilio ya domicilio, pero se confirmará la prohibición de consumirlos al aire libre y en las inmediaciones del local.
Ante esta situación de alto riesgo, también se plantea dar marcha atrás en el plazo -ya fijado para el 27 de marzo- de reapertura de cines y teatros. La decisión se tomará después del 20 de marzo, cuando se evaluará si las nuevas medidas han funcionado.
Te puede interesar:
- Toda Italia los fines de semana podría convertirse en Zona Roja
- Ciudadanía Italiana por matrimonio en el 2021: cómo solicitarla?
