Estas son algunas hipótesis de cuales serán las medidas para reiniciar a salir a la calle y cuales serán las prevenciones que tendriamos que tomar después de la cuarentena.
En un primer término, se abordará lo concerniente a las medidas de individuales como colectivas. En este punto entraría hacer extensiva la recomendación del uso de mascarillas a toda la población, una medida de protección que podría ser mundial.
El uso de mascarillas en lugares públicos se ha hecho obligatorio en países como Israel, República Checa y Eslovaquia.
Test masivos y de inmunidad
En segundo lugar, se ubican las «acciones sanitarias de detección y atención a aquellas personas que estén afectadas por el coronavirus». Testar de manera adecuada, rápida y a toda la población permite establecer en qué punto se encuentra la pandemia e incluso predecir sus variables. Podría ser la única forma de perfilar el escenario real de la infección en Italia. En esta fase se prevé implantar de forma masiva un sistema de test que permitan diagnosticar la inmunidad o el riesgo de contagio de los italianos, con el fin de ir escalonando su exposición pública.
Monitorización del virus
Finalmente, también se pretende vencer al COVID-19 con la tecnología, a través de iniciativas que permitan el control y seguimiento de la epidemia. En concreto, con el uso de aplicaciones móviles que realicen un autodiagnóstico del usuario, de manera que se descongestionen los sistemas de atención telefónica de las comunidades autónomas.
Paralelamente se avanza en otras «apps» que permitan la geolocalización de quien las usa para ofrecerle información específica de su comunidad o entorno urbano. Otra alternativa que se estudia es monitorizar la movilidad de los usuarios para fiscalizar si se cumplen las restriccines de confinamiento e identificar núcleos con riesgo de una masificación excesiva que puedan incentivar el contagio.
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